jueves, 24 de mayo de 2012

Achtung Girl




Bueno, bueno... Veinte años ya del Achtung Baby de U2...
En realidad los veinte años se cumplieron en 2011, pero como no compré esta reedición hasta hace poco no he hablado de ella antes. En cualquier caso, hablamos de música atemporal, así que las fechas aquí no son lo importante. Lo realmente importante es el contenido de este disco, que en 1991 dejó alucinado a medio mundo.
Para mí, la época realmente interesante de U2 comienza con este álbum. No es que me parezca que "The Joshua Tree" sea un mal disco ni mucho menos, de hecho me parece un puto clásico, pero sí es verdad que la primera mitad del disco me funciona mucho mejor que la segunda, o que "The Unforgettable Fire", de la misma época (sónicamente hablando), me gusta más en conjunto. Tampoco me disgusta la primera etapa de la banda, aunque "October" adolezca del síndrome del segundo disco. "War" fue una excelente manera de crecer como compositores, con canciones firmemente instaladas en el repertorio clásico de U2. Para mí, el gran logro de Brian Eno y Daniel Lanois con "Fire" y "Tree" se concentra principalmente en dar carta blanca a The Edge, uno de esos guitarristas que no se parecen a nadie en el mundo y que consiguen que su banda no se parezca tampoco a ninguna otra, como ocurre con Tom Verlaine de Television, Robert Fripp de King Crimson, Dave Gilmour de Pink Floyd, Andy Summers de The Police, Steve Howe de Yes o Brian May de Queen. Con "Rattle And Hum" bajaron un poco el nivel, pero Berlín estaba a la vuelta de la esquina...
Con "Achtung Baby" comenzaba el período arty de U2, su particular trilogía berlinesa, y no podía comenzar mejor: "Zoo Station" se encargaba de dinamitar cuaquier parecido anterior con una banda de rock al uso. El uso de la electrónica los hacía emparentarse con unos Depeche Mode que por esa época hacían el recorrido inverso; "Even Better Than The Real Thing" dejaba claro que el potencial melódico se había ensanchado hasta límites nuevos para ellos; "One" arrebataba el alma, al menos en las cien primeras escuchas; "Until The End Of The World" se convertía en un riff clásico de guitarra y en mi tema favorito de U2; "Who´s Gonna Ride Your Wild Horses" se lo ponía difícil a los Rolling Stones; "So Cruel" mantenía el listón; "The Fly" ofrecía algunos de los mejores falsetes de la historia del Rock; "Mysterious Ways" hacía mover el culo como nunca... y así seguía el disco, hasta acabar, clásico tras clásico, gema tras gema.
Poco después editaban "Zooropa", aún más pasado de vueltas y experimental, y para muchos (y para mí) su mejor disco. Más tarde remataban su oda/crítica al plástico con "Pop", un disco excelente que se suele considerar el peor de la banda, algo que no entiendo existiendo "October", "Rattle And Hum" o el siguiente "All That You Can´t Leave Behind", que encuentro sobrevalorado pese a contener grandes temas. Entretanto U2 se convirtió en un monstruo en directo, con montajes cada vez más complicados y enormes, y Bono en un personaje (o varios) heredero del sentido teatral de Bowie, pero también desfilaban influencias de Lou Reed, The Beatles, The Doors, Roxy Music, Elvis Presley u Orbital, por citar unos pocos.
U2, como se puede apreciar en el vídeo de Sydney de la gira de Zooropa, eran un espectáculo total, novedoso y pertinente aún hoy, que celebraba la singular liturgia de los conciertos de rock con auténtica devoción y perfecta ironía a partes iguales. Un Bono enfundado en cuero absolutamente insoportable en su papel de divo (The Fly) mediático rodeado de pantallas en constante emisión caótica era infinitamente más divertido que el espiritual chico al que se le fue la olla en el Live Aid; McPhisto conseguía echarle la pata en cuanto a acidez y sobreactuación; coches alemanes usados como focos colgados del techo del escenario o el detalle de salir a tocar cuatro canciones en una pista de colores como la de "Saturday Night Fever" desde un limón gigantesco que se abre por la mitad, junto a media eme de MacDonalds del tamaño de un edificio... era algo que no se había visto antes, la verdad. Aunque todo eso casi palidece ante el último montaje que idearon, la popular "araña" que ocupaba un estadio de babor a estribor y soportaba una pantalla circular que se plegaba y ... bueno, creo que ya sabéis de lo que hablo. Casi demasiado.
Los últimos discos me parecieron mejores que su supuesta vuelta a las raíces de "All That You...": "How To Dismantle An Atomic Bomb" me pareció una excelente colección de canciones, y el criticado "No Line On The Horizon" su mejor álbum desde "Pop", si no mejor.
Pero "Achtung Baby", su disco de transformación, el disco que influyó y animó a toda una pléyade de artistas muy diversos para afrontar un deseado cambio (recuerdo el "Slang" de Deff Leppard, o el "Generation Swine", de Motley Crüe, qué desastre) permanece como uno de los discos más decisivos de los noventa, junto al "OK Computer" de Radiohead. Todo un modelo al que remitirse para reinventarse.
Yo tengo la edición Deluxe, el CD doble. Para la edición con las gafas de The Fly no me llegaba la pasta, lástima.
http://achtungbaby.u2.com/

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